Así daremos a tu subconsciente algo de lo que apartarse y algo a lo que aproximarse.

Se trata de una técnica que prepara el subconsciente para que te ayude a alejarse de aquellas fuentes de azúcar en las que normalmente no reparas.

A medida que aumente tu conciencia del muchísimo azúcar existente en el entorno alimentario, irás integrando esos conocimientos y descubrirás una verdadera atracción hacia el objetivo de sentirte sano cada día y dejarás que esa sensación te guíe cada vez con más fuerza.

Lee este ejercicio entero, de principio a fin, antes de comenzar a practicarlo.

Luego, tómate cuatro o cinco minutos para realizarlo, visualizando con la máxima claridad posible cada uno de los pasos.

Realiza este ejercicio una vez a la semana como mínimo.

Cuando se lo haya mostrado con la máxima claridad a tu subconsciente, se habrá instalado en él el rumbo correcto.

Tienes que estar en un sitio donde puedas cerrar los ojos tranquilamente durante diez minutos sin que nada ni nadie te moleste.

Muchas personas se sienten un poco incómodas al hacer este ejercicio. Sien algún momento notas que te está resultando demasiado molesto, deja de practicarlo, porque significa que no es adecuado para ti. Ahora imaginemos dos futuros completamente distintos:

1. Relájate, cierra los ojos e imagina que estás próximo al final de tus días. 
2. En este escenario que estás visualizando, has seguido comiendo azúcar sin cuidado durante toda tu vida y, sabiendo lo que sabes ahora sobre los peligros del azúcar, deja que tu subconsciente te muestre cómo podría ser tu salud en ese momento… Es posible que, llegado a la vejez, sufras diabetes, problemas cardiacos o cáncer. ¿Quizá has tenido un ictus? ¿O un ataque al corazón? Puede que la escena que visualices sea la de ti mismo inmovilizado en una cama de hospital y rodeado de tus seres queridos, muy entristecidos por la situación. 
3. En esta imagen, ¿Qué le diría ese «yo» tuyo más mayor y más enfermo a tu otro «yo» actual, más joven, para que valorases y protegieses tu salud y la de tu familia? 
4. Deja que tu subconsciente repase bien esa visualización y, cuando hayas recibido los mensajes que necesitas captar para dirigirte hacia una buena salud, la imagen se desvanecerá. 
5. Ahora imagínate un segundo escenario en el que estás próximo al final de una vida maravillosa, una vida en la que aprovechaste este libro para disminuir radical y permanentemente tu ingesta de azúcar. Tienes más años, pero gozas de buena salud. Te sientes agradecido por una larga vida saludable y feliz, rodeado de amigos y familiares. Desde esa perspectiva de una vejez sana, ¿Qué consejo te daría esa sabia persona mayor? 
6. Deja que tu subconsciente repase bien esa visualización y, cuando hayas recibido los mensajes que necesitas para dirigirte hacia una buena salud, la imagen se desvanecerá.
7. Ahora crea una fotografía fija en blanco y negro de la imagen de ti mismo con mala salud por culpa del exceso de azúcar y colócala a tu izquierda.
8. Ahora visualiza una fotografía más grande, colorida y resplandeciente de esa otra vejez sana y feliz imaginada y colócala a la derecha.
9. Imagina las dos y, ahora, reduce la foto representativa de la enfermedad y ve alejándola hasta situarla a cierta distancia de ti. Al mismo tiempo, agranda la foto de la imagen de buena salude ilumínala, resáltala y acércala.
10. Siempre que necesites un estímulo consciente de buena salud y motivación,  repite los pasos 6, 7 y 8.

Y si te gustó el contenido, no olvides dar tu ′′ Like ′′ y también compartir este material con tus amigos